Almafuerte es un pequeño pueblo rodeado de extensos campos de girasoles. La vida de sus habitantes transcurría sin grandes cambios, todos se conocían. Hasta que un día se sorprendieron con una noticia especial: había llegado una nueva familia para quedarse. Julián, el hijo mayor, no estaba de acuerdo con la mudanza. Su barrio, su escuela, sus amigos habían quedado lejos. Sin embargo, nuevas experiencias, nuevos amigos y una persona muy especial lo ayudarían a realizar valiosos descubrimientos.