Las organizaciones de cooperación como CARE, Oxfam y Médicos sin Fronteras han disfrutado de la confianza del público y de los subsidios gubernamentales sin afrontar demasiados cuestionamientos. Sus presupuestos anuales pueden sobrepasar fácilmente las decenas y a veces los centenares de millones de dólares o libras esterli nas. Varias de ellas se han convertido en virtuales multinacionales que se desenvuelve