¿Es usted una princesa que, con frecuencia, vive como una pordiosera en su propio reino? Aprópiese de su llamado como hija del Rey. Su posición “en Cristo” debe llevarla a vivir una vida abundante. Sin duda alguna conocerá a través de este libro, que usted es amada incondicionalmente por su Padre el Rey y tiene una herencia incalculable:Fortaleza – Justificación – Valor – Protección - Seguridad