"No s cu nto durar esta guerra, pero s¡ s que cuanto m s sealargue, m s desarraigar , destrozar y mutilar a los ni¤os y m sdif¡cil ser salir de ella", afirma el desaparecido Didier Lefvre, el fot¢grafo protagonista de este c¢mic. Se march¢ a Afganist n en julio de 1986, en plena guerra entre soviticos y muyahidines, paradocumentar la misi¢n humanitaria de una delegaci¢n de Mdicos SinFronteras. Un periplo en caravana desde Paquist n hasta el coraz¢n deAfganist n, las intervencionesen hospitales improvisados, risas, angustia, fraternidad...Emmanuel Guibert hila vi¤etas y fotograf¡as para contar esa misi¢n que trastoc¢ la vida del fot¢grafo, de la misma manera que aquella largaguerra marc¢ la historia contempor nea, y declara que este c¢mic,publicado originalmente en tres vol£menes entre 2003 y 2007, "muestraen detalle lo que rara vez se ve: un reportaje en proceso, una misi¢nhumanitaria en su d¡a a d¡a, el destino de una poblaci¢n de monta¤eros atrapada en la guerra".Sobre el origen del proyecto, el dibujante de La hija del profesorcomenta que "cuando un reporterovuelve de una misi¢n en un pa¡s en guerra, trae con l un centenar defotos y de ancdotas. S¢lo 4o 5 son vendidas a prensa, el resto acaba en cajas. Luego el tiempopasa, y la memoria tambin se encarga de meter esas ancdotas encajas. As¡ es como se duermen las historias. El c¢mic es una manera de despertarlas. El c¢mic interviene para dar voz a Didier, rellenar los huecos entre las fotos y contar lo que pasa cuando, por un motivo uotro, no pudo fotografiar.