La acción de El Plan Morgana responde a la estructura planteamiento, nudo, desenlace. El narrador entrega acontecimientos ordenados en capítulos organizados de tal manera que el lector pueda sumergirse en la investigación, crear hipótesis, comparar con los sucesos que viven los personajes y originar intriga por los siguientes hechos. Los personajes son individuos de carne y hueso, muy corrientes y cotidianos, con problemas personales y profesionales que, no obstante, deben luchar con las adversidades que provocan los acontecimientos propios del desarrollo de la novela, y deben poner a prueba el amor, la amistad, la solidaridad, el ingenio, los valores humanos y sociales y ser críticos del entorno, lo que a la vez, invita al lector a participar de esos parámetros. Aquí se destaca el protagonismo de la criminóloga y agente de la Agencia Nacional de Inteligencia Sandra Calderón, quien caracteriza y representa al prototipo de mujer latina tanto en rasgos físicos como en su personalidad y agudeza, y también da espacio a su compañero de labores, Manuel Manríquez, un joven recién titulado de la universidad que comienza a dar sus pasos en las investigaciones de la Inteligencia Nacional. Los demás personajes de la novela están definidos por sus roles políticos (presidentes, ministros, entre otros), quienes están representados con perfiles del mundo real. La ambientación de la novela muestra variados paisajes y culturas, tales como: Santiago de Chile, La Paz (Bolivia), Lima (Perú), Buenos Aires (Argentina), Parral (Chile), la Zona Austral de Sudamérica, la Antártica, Puerto Natales, frontera Chile, Perú, Bolivia, Argentina, Océano Pacífico, Antofagasta y Arica (Chile).