Originaria de China, Kuan Yin tiene muchos devotos tanto en oriente como en occidente, y se le atribuyen muchos milagros. El libro se abre con una introducción a la figura de Kuan Yin, quien ocupa el lugar ahora regenta Saint Germain como señor de la llama violeta. A continuación empieza el rosario de de cristal de Kuan Yin.