La Masonería vió la luz el 24 de junio de 1717 en una taberna de Londres, situada cerca de la catedral de San Pablo, en esos momentos en construcción. Era el resultado de la fusión de cuatro logias o sociedades ocultas operativas contra los Estuardo, que originaron la Gran Logia londinense, posteriormente la Gran Logia de Inglaterra; un frondoso árbol, repleto de ramas con matices distintos en algunos casos, que nos drivan siempre al mismo origen. No habían transcurrido más que veintiún años desde el nacimiento de la Masonería cuando el papa Clemente XII la condenó en 1738. La historia de estos casi trescientos años, tal como explica Alberto Bárcena, es el de la incompatibilidad entre la Iglesia Católica y la Masonería, concentrada en estas palabras de San Agustín: “Dos amores edificaron dos ciudades: el amor a sí mismo hasta el desprecio de Dios edificó la ciudad terrena; el amor de Dios hasta el desprecio de sí mismo, la celestial”
"Excelente libro, sirve de introducción para comprender porque el cristianismo no es compartible religiosamente con la masonería. Además, de ahondar en la infiltración que ha sufrido la iglesia. Sirve para comprender por qué la crisis valorica y el ataque que está sufriendo el catolicismo y cristianismo en el día de hoy por las leyes globalistas y los medios. "
María Emilia Sola Lunes 25 de Febrero, 2019"Exelente"
Luis Gerardo Castro Carriedo Martes 09 de Julio, 2019"EXCELENTE LIBRO"
Diego Fernando Albarracin Rodriguez Domingo 15 de Septiembre, 2019"Excelente"
Francisco Velasco Delpiano Miércoles 04 de Diciembre, 2019"El libro es excelente, nos da un panorama distinto a cómo ha sido la historia y como intereses personales de unos pocos grupos están por sobre el bien común de toda la humanidad"