El jardin del Monasterio del Escorial da titulo a este poemario. Alguien con paso corto e impredecible lo recorre. Bojes, rosas, el estanque, cualquier gravilla, le traen a la memoria inventada frailes con sandalias de piel de ciervo y cordones de tres nudos que en silencio labran y rezan cantos beneventanos.El paseante, a quien el aire le va susurrando palabras aventuradas q...