Un ata£d no reclamado. Una cadena de muertes, un macabro juego ideadopor el asesino de los cr¡menes perfectos.El Palacio de Hielo de Madrid, habilitado como morgue provisionaldurante la pandemia, no puede cerrar sus puertas y regresar a suactividad porque el ata£d no reclamado de una anciana lo impide. Elinspector Salado y su ayudante Jaso acompa¤an al supersticioso juezCalvo a la inspecci¢n preliminar, que les depara una sorpresa: en suinterior hay un var¢n con traje a medida y un Rolex de oro en lamu¤eca. Lo que parece una confusi¢n de clasificaci¢n los introducepoco a poco en un macabro juego: una cadena de muertos, a cada cualm s peculiar, que tienen en com£n la firma, en el certificado dedefunci¢n, de la doctora Paloma Padierna, joven internista en elGregorio Mara¤¢n. La doctora Padierna, ajena al asunto y agotada traslos duros meses de trabajo en el hospital, solo piensa en susvacaciones. Pero el asesino de los cr¡menes perfectos tiene otrosplanes para ella.