Como una joven madre, Priscilla Nadesan se esforzaba por enseñar las lecciones que Dios provee en su palabra a sus hijos. Estas lecciones están creadas para ayudarnos a moldear y crear la mejor versión de nosotros mismos. De acuerdo con Proverbios 22:6, nosotros formamos a nuestros hijos en los caminos correctos para que cuando sean viejos no se aparten de él. Este y todos los futuros libros, en la voluntad de Dios, son una representación de nuestro caminar en Cristo, la cual ayudará a nuestros hijos a convertirse en gente maravillosa mientras crecen. Los niños son una bendición y los padres cristianos no deben hacerlo solos. Dios es el verdadero padre. Los padres son herramientas que Cristo usa para instruir al niño en sus caminos para que cuando crezcan él o ella luz en un mundo de oscuridad. Nuestra meta es enseñarle a nuestros hijos dondequiera que sean misericordiosos, respetuosos, amorosos y con el conocimiento principal de ser devotos a Dios y a su palabra.