En el siglo pasado, Tocqueville afirmaba que en Estados Unidos todas las personas se parecen: cultivan el individualismo económico y la libre iniciativa, y manifiestan un cierto conformismo hacia todo lo demás. El ciudadano francés, en cambio, necesita que le brinden seguridades y es afecto a la crítica. Los sistemas republicanos de ambos países también difieren: Estados Unidos es una república federal donde prevalece lo local; en Francia, república unitaria, la diversidad regional está sujetada a la unidad superior de la nación.En la presente obra Régis Debray expone las principales características del sistema republicano. Con un lenguaje de fácil comprensión y no por ello menos riguroso, explica las ventajas y los inconvenientes de cada tipo de república, así como su relación con la democracia, el requerimiento de separación de poderes y la necesidad de educación y laicismo.En la situación actual, en que sufrimos la limitación de las soberanías nacionales y la integración cultural al imperio norteamericano, cuando el éxito se mide en función de la cantidad y el ciudadano se oculta detrás del cliente, la imagen de la república y el conocimiento de su historia deben permanecer vivos en nosotros. Los innovadores tienen mucha memoria; cada salto hacia adelante tuvo presentes las huellas del pasado.I. Los dos modelos 7II. Las palabras y las cosas 19III. Civilidad, ciudadanía, nacionalidad 29IV. El coraje de la ley 45V. El principio de laicismo 57VI. La tarea sin fin 71Epílogo 83