Unas son las mentiras que se dicen y de las cuales yo soy consciente que las estoy diciendo; por ejemplo, “digan que no estoy, y si estoy”, “Ya voy llegando, y ni siquiera he salido”. Pero otras, son aquellas mentiras, que yo considero verdad; aquellas mentiras que están arraigadas en mi alma; incrustadas en mi mente, en mí sentir, en mi hablar y actuar, y que para mí son una verdad. Son aquellas mentiras que vienen como verdades adquiridas por herencia familiar (conocidas como iniquidades o pecado de familia), o por el contexto social, económico, cultural en el cual yo crecí o me muevo actualmente. Son esas mentiras a las que hace referencia Isaías 5:18 “¡Ay de los que arrastran INIQUIDAD CON CUERDAS DE MENTIRA, y el pecado con sogas de carreta! “ Son estas mentiras que yo considero verdad, las que hoy venimos a desenmascarar en este libro. Son esas mentiras, que en el libro se escribieron en AFIRMACIÓN (“En esta casa se hace lo que yo digo y punto”; “Así soy yo y así me conoció”; “Yo me casé, pero no me amarré; tengo derecho a mí espacio, a mi 5% “NO ME ASFIXIES”;“Lo importante es el tiempo de calidad y no de cantidad”; “Hagamos lo que diga el corazón”; “Los gastos en el matrimonio son por mitades…Y lo que, a cada uno le sobre, se lo puedo gastar como quiera”; “En el sexo todo se vale”); es decir, aseverando verdades, que a la luz de la Palabra no lo son, como bien lo reafirma Isaías 5:20 “20 ¡Ay de los que llaman a LO MALO BUENO Y A LO BUENO MALO, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!”. Recordemos que LA primera MENTIRA disfrazada de verdad se manifestó desde el Edén, cuando Adán y Eva cayeron en el engaño de la serpiente, Génesis 3:1-6. ¡Desafortunadamente!, ÉSTO que le sucedió a Adán y a Eva, el primer matrimonio monógamo, heterosexual entre hombre y mujer de la creación, aún, sigue sucediendo a muchos matrimonios, que tristemente siguen en desobediencia, engañados, y esclavizados por las mentiras y artimañas de satanás, viviendo matrimonios en conflicto, tristeza y frustración. Ahora bien, no sé en qué situación está hoy tu matrimonio; en qué mentiras del enemigo quizás está encadenada tu relación; pero lo que sí sé, es que Cristo en la cruz rompió con esas cadenas de esclavitud, con esos engaños, y su verdad nos dio libertad y seguridad, Juan 14:6ª “Yo soy el camino, LA VERDAD y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí’’. Es así, como a partir de este libro estamos invitando a los matrimonios a darle la oportunidad a Cristo para que los guíe por medio de su Espíritu Santo a identificar, desenmascarar y desechar aquellas mentiras que están afectando hoy su relación matrimonial; de forma tal, que tomen la decisión desde hoy, de caminar esposo y esposa juntos en la VERDAD que enseña la Palabra de Dios, dada por la revelación del Espíritu Santo en la Persona de Jesucristo, y puedan así, disfrutar de la VERDADERA LIBERTAD, GOZO Y PLENITUD DE VIDA MATRIMONIAL que trae el caminar conforme a la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios.
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