Cuando Darío I el Grande ascendió al trono, el gigantesco Imperio persa de la dinastía aqueménida se extendía desde Asia Menor hasta el norte de la India. El famoso rey decidió levantar una gran capital acorde con tan vasto reino: Persépolis. Hoy, los vestigios de la que fue una de las ciudades más majestuosas del mundo antiguo todavía se alzan a los pies de la sagrada montaña Mitra. - Las más asombrosas ciudades de las civilizaciones antiguas reviven con su aspecto y colores originales, tal como las vieron sus pobladores. - Todos los volúmenes de la colección ofrecen una sólida estructura de textos, fotos, gráficos y mapas que aportan los fundamentos arqueológicos, históricos y culturales imprescindibles para que el lector disfrute de una comprensión global de cada sitio arqueológico.