Los ciudadanos sufrimos las consecuencias del estallido de la burbuja en forma de desahucios, asfixia hipotecaria y dificultad para acceder a un derecho con el que muchos especularon. Urgen medidas para reconvertir el parque de vivienda, potenciar el alquiler y la vivienda social, rescatar a las familias hipotecadas y fr enar de inmediato los desahucios.