Existe una clase de armas frente a las cuales nuestra sociedad es particularmente vulnerable:las armas bacteriológicas,capaces de esparcir sustancias infecciosas o tóxicos.Su accesibilidad,aumenta aún más su peligrosidad.Frente a la superioridad militar convencional de las grandes potencias,muchos países disponen de una amenaza lo suficientemente terrible como para disuadir a un eventual agresor.Este estudio histórico se propone esclarecer al lector no especialista las características de este peligro y explicar qué dicen los tratados internacionales destinados a erradicarlo.