Como el oleaje, fuerte y recio, que se bate contra los malecones, los versos de María Canosa se mecen sobre las páginas de este libro. También marchan y regresan. Se adelantan o rezagan. Van y vuelven. María Canosa es hoy uno de los más claros y firmes valores de la literatura gallega actual. Por méritos propios. Porque en cualquiera de las disciplinas que cultiva, artículo periodístico, ficción o lírica, en cualquiera de ellas, sobresale por su amor hacia las palabras, por su respeto por la lengua, por su pasión por la buena escritura. Por su compromiso con la literatura bien hecha. Y también por su extraordinaria sensibilidad y por su ternura. Amigo lector, cierre los ojos. Escuche roncar el mar. Si es el de la Costa da Morte, mucho mejor. Vuelva a abrirlos. Y sumérjase en la lectura de estas cincuenta y tres páginas que María Canosa creó a orillas del océano. Allá donde la tierra toca a su fin. Y vuelva a escuchar cómo ronca el mar. Una y mil veces. Sentirá que ha iniciado un viaje hacia la felicidad perpetua. ERNESTO S. POMBO