La causa de nuestros problemas podría estar en la historia de nuestra familia. No solo heredamos las características físicas de nuestros antepasados, sino también sus deudas con la vida y sus problemas. No obstante, si tomamos el lugar que nos corresponde en la familia y hacemos las paces con el pasado, podremos solucionar aquello que tanto nos atormenta: los vacíos emocionales, los bloqueos económicos y las dolencias físicas. Susana Otero explora en estas páginas uno de los más interesantes métodos terapéuticos de nuestros días: las constelaciones familiares. Esta terapia, creada por el reconocido Bert Hellinger, nos enseña a buscar en lo más profundo de nuestra alma e historia familiar la solución a nuestros problemas físicos y emocionales, a través del reconocimiento y el perdón. Conocer la historia nos libra de repetirla, y es precisamente este el principal objetivo de las constelaciones familiares.