El conjunto de citas que da forma a este libro, más bien un repertorio de yerbas y usos medicinales, antecedido de su posible gramática, se basa en entrevistas y otros diálogos que con más o menos precariedad se construyeron entre 2001 y el 2002 en la zona cordillerana del valle del Huasco, en Atacama. Por la población indígena que lo habitaba, hasta el siglo XIX las riberas del río El tránsito eran llamadas "El valle de los naturales". Ellas alimentan linajes cuyas descendencias mestizadas se aprecian hasta hoy. Sus voces hablan de tradiciones médicas, concepciones de la enfermedad, el cuerpo y la muerte en cierta tensión con la racionalidad occidental y sus quistes higienizadores. Lejos de la nostalgia y también del beneplácito, el texto esboza las dinámicas culturales presentes en el valle, con sus permanencias y reacomodos simbólicos a partir dele ingreso del sistema de salud estatal, las nuevas formas de religiosidad, el capital privado y la monetarización de las relaciones.